A pesar de que falta más de un año para las elecciones legislativas en los Estados Unidos, las mismas van a tener un hondo impacto en el futuro de dicho paÃs y en la economÃa global, ya que determinarán el margen de maniobra que tendrá Donald Trump en la segunda parte de su mandato.
Todas las mediciones de opinión que se tienen hasta el momento prevén una elección muy competida, ya que, en un promedio de las últimas 12 encuestas publicadas, los demócratas apenas van arriba en un 2.6% sobre los republicanos en la intención de voto para el Congreso de los Estados Unidos, sin embargo, se trata de una proyección nacional que se encuentra muy cerca del margen de error.
Además, se debe considerar que se trata de datos agregados, porque cuando nos vamos al detalle por distritos, las proyecciones nos indican que los republicanos van a la cabeza en 214 distritos y los demócratas en 201, quedando 20 distritos que se encuentran muy cerrados para asignar una preferencia, por lo que en la práctica esos 20 distritos van a definir la mayorÃa en la Cámara Baja y sà Trump contará con el respaldo legislativo para el final de su presidencia.
De esos distritos, California, Pensilvania, Ohio, Arizona y Michigan tienen dos, mientras que Texas, Colorado, Iowa, Maine, Nueva Jersey, Nuevo México, Nueva York, Virginia, Washington y Wisconsin tienen uno cada uno.
De forma que la posibilidad de hacer un contrapeso desde el Congreso, imponiendo lÃmites a la administración de Trump, dependerá de su habilidad para ganar al menos 17 de esos 20 distritos, porque si no lo hacen el actual Presidente seguirá con mayorÃa legislativa.
Obviamente se trata de una foto del momento, ya que acercándose la elección la ventaja de los demócratas se puede ampliar y algunos distritos que hoy se presume tendrÃan preferencia republicana pueden virar o lo contrario, afianzarse la mayorÃa republicana, por lo que deberemos estar atentos a la evolución de esta elección.