Salvador Borrego

Leyendo las se帽ales de alerta.

Mientras la Encuesta Tradicional solo nos dice si estamos bien o mal. Con el nuevo esquema tenemos seis estados para evaluar la situaci贸n: bien mejorando, bien estable, bien empeorando, mal mejorando, mal estable y mal empeorando.

A pesar de las travesuras que las redes sociales les han hecho, de las encuestas se pueden rescatar varias cosas.

Su uso propagand铆stico es lo que les ha dado 鈥渧ida鈥� a grado que han proliferado, a pesar de haber perdido no solo su valor predictivo, sino incluso su credibilidad.

La encuesta responde a una condici贸n est谩tica. Para fen贸menos din谩micos debemos aplicar t茅cnicas estad铆sticas desarrolladas para fen贸menos din谩micos, como lo son los Diagramas de Control Estad铆stico de Calidad.

Los pol铆ticos m谩s que salvaguardar la encuesta como garante de la democracia, la corrompieron, con la complicidad de algunos comunicadores.

Han desaparecido un buen n煤mero de casas encuestadoras, pero han surgido una gran cantidad de alternativas muy computacionales, muy jodidas pero muy baratas.

Compa帽eros y amigos. A continuaci贸n les comparto los temas que conforman la segunda parte de mis lecciones dirigidas a mis clientes.

Si los de Morena renuncian al arte de hacer pol铆tica, es claro que est谩n optando por entrar al callej贸n de los chingadazos, donde podr铆a escalar la violencia.

La 鈥渆ficacia鈥� de la senadora panista como opositora abona a la polarizaci贸n y termina favoreciendo a la 4T; pero si Claudia Sheinbaum se ensa帽a contra ella, podr铆a convertirse en la hero铆na que las oposiciones no tienen y quiz谩 necesitan.