Salvador Borrego

Si Xóchitl y su gente hubieran atendido mis advertencias, quizá hubieran encontrado la forma de ser más competitivos.

Mis propuestas para que López Obrador permanezca en la vida pública y no se vaya a la chingada.

Durante los meses siguientes estaremos entre las locuras de AMLO y la esperanza de que Claudia recupere la racionalidad en la toma de decisiones.

Si sigues agradeciendo a AMLO por haberse chingado a quienes envidias, antes de votar por  Morena detente un momento  y escucharás: ¡No me quiero morir!

El riesgo de que los más oscuros intereses (incluidos los de AMLO), encuentren propicio un enfrentamiento para agravarlo y llevar agua a sus molinos, también es elevado.

Estoy en una guerra de baja intensidad que al final habré de ganar.

Una encuesta perfectamente realizada puede fallar, y una encuesta pésimamente realizada puede acertar.

Xóchitl debió llegar al debate bajo protesta, por estar en curso el Mega Fraude del Bienestar. Y debió denunciar durante el debate todas las tropelías de AMLO. No lo hizo.

Hay indicios de que pudiera estarse dando el fenómeno del voto oculto ante el temor que se estaría generando en algunos sectores si dicen lo que en realidad piensan.

Un candidato prudente evalúa periódicamente el desempeño de su campaña, para eventualmente hacer ajustes estratégicos, pero sobre todo para que la táctica política también juegue su función trascendental.